En el interior del sistema respiratorio, primero se inhala el aire hacia la faringe a través de la nariz o de la boca. Desde la faringe, el aire es empujado hacia la laringe y la tráquea para que se abra paso hasta los pulmones.
Se recomienda utilizar los navegadores IE9 o superior, Firefox o Google Chrome para visualizar mejor los contenidos de A.D.A.M.