Es un cuello uterino débil que predispone a una mujer para el aborto espontáneo a mitad del embarazo o parto temprano (prematuro). Esto también se ha denominado incompetencia cervical o del cuello uterino.
El cuello uterino es el punto estrecho en la base del útero. En un embarazo saludable, el cuello uterino comienza a dilatarse o se abre muy al final del embarazo, antes de que se inicie el trabajo de parto. Cuando el cuello uterino se ha debilitado, se puede abrir demasiado pronto en el embarazo, lo que lleva a una amenaza de aborto espontáneo o parto temprano (prematuro).
Los abortos espontáneos resultantes de una insuficiencia del cuello uterino ocurren generalmente a los cuatro meses del embarazo o después. Cerca del 25% de los abortos espontáneos ocurridos después de la semana 14 del embarazo se atribuyen a la insuficiencia del cuello uterino.
Se desconoce la causa exacta de la insuficiencia o debilidad del cuello uterino. Algunas veces, se asocia con un nacimiento previo traumático (durante el cual se desgarró el cuello uterino), una conización quirúrgica, embarazo con gestación múltiple (gemelos, trillizos) o abortos espontáneos recurrentes y tardíos. También se lo asocia con un cuello uterino de desarrollo anormal.
Si usted posee un historial de abortos durante el segundo trimestre del embarazo u otros indicadores de insuficiencia cervical, consulte con su médico acerca de la salud de su cuello uterino. También debería informarle a su médico si se le ha practicado un procedimiento quirúrgico en el cuello uterino, como una conización quirúrgica.
Generalmente, la insuficiencia cervical no presenta síntomas, por lo que pocas mujeres se percatan de que padecen esta afección hasta que sufren un aborto. Los síntomas de aborto debido a la insuficiencia cervical incluyen presión abdominal y sensación de tener una "protuberancia" en la vagina. Por lo general, una mujer con un cuello uterino insuficiente nunca siente contracciones.
Si su médico sospecha de cuello uterino insuficiente, puede sugerirle una ecografía para examinar el grosor del tejido de su cuello uterino. La ecografía puede realizarse cuando está planificando un embarazo o en las etapas iniciales de éste. Una histerosalpingografía (HSG) también puede ayudar a determinar la apariencia del canal cervical en un estado distinto al embarazo.
Si usted tiene antecedentes de insuficiencia cervical o si su cuello uterino aparece corto en una ecografía, se le puede ofrecer un cerclaje, un procedimiento quirúrgico que consiste en cerrar el cuello uterino con suturas durante toda la etapa del embarazo con un hilo resistente. Después de un cerclaje, normalmente se le prescriben medicamentos a la mujer para evitar un aborto derivado de la cirugía. Las suturas se retiran cerca del noveno mes del embarazo o antes, si comienza el trabajo de parto, para preparar el alumbramiento.
Los cerclajes parecen funcionar bien: entre el 70 y el 90 por ciento de las mujeres que se practican un cerclaje dan a luz a un bebé viable.
Muchas mujeres con cuellos uterinos cortos optan por no practicarse una cirugía y aun así dan a luz a bebés saludables. Algunas veces, los médicos pueden ofrecer un medicamento llamado progesterona. Asegúrese de hablar con su médico en detalle acerca de los riesgos y beneficios de las opciones clínicas y quirúrgicas antes de tomar su decisión.
P: ¿Debo preocuparme por cuello uterino insuficiente en un futuro embarazo?
R: Sí. Generalmente, una mujer con esta afección necesitará tomar precauciones en embarazos subsiguientes.