El feto pesa casi 1 onza (28 g) y mide alrededor de 3½ pulgadas (8.9 cm) de largo. Por lo general, durante esta semana, el cabello puede comenzar a crecer en la cabeza del feto y en otros lugares como las cejas. Si es niña, sus ovarios ya tienen óvulos en el interior. Para los niños, ahora es cuando se están comenzando a formar los genitales externos (el glande).
Muchas mujeres en espera pueden experimentar una variedad de síntomas del embarazo. Aparte de presentar malestares y dolores, el tracto intestinal completo no funciona apropiadamente. Algunas futuras madres tienen acidez estomacal, indigestión, flatulencia o extreñimiento. Si usted presenta algunos de estos síntomas, se puede preguntar si esto afectará a su bebé. Lo mejor que puede hacer es alimentarse adecuadamente para usted y su bebé.
Mantenerse relajada puede ayudar a calmar su estómago. Si ninguno de estos consejos ayudan a que su organismo se restablezca, hable con su proveedor de atención médica.
Nunca es demasiado tarde para alterar sus hábitos alimenticios. Intente comer más frutas y vegetales, y consuma menos dulces y alimentos procesados. Evite alimentos aceitosos, grasosos y picantes que puedan causar indigestión y reflujo. Para ver lo que debería estar comiendo, cuántas veces al día y por qué, reviste este cuadro nutricional de la dosis diaria recomendada.
Una madre veterana recomienda mantener un calendario detallado haciendo una crónica de cada suceso durante los 9 meses. Allí puede señalar sus citas con el médico, emociones generales, la primera vez que sintió al bebé moverse, comentarios de amigos y familiares, antojos, o cualquier cosa que se le antoje. ¡Es un gran medio que le ayudará a recordar todos esos primeros y preciosos momentos!